El transporte de residuos es básico para mantener cualquier espacio en condiciones de limpieza, higiene y salubridad óptimas. También es uno de los puntos fundamentales en el Plan de Gestión de Residuos de empresas, ayuntamientos e instituciones.

En este artículo, desde SMV desarrollamos algunas cuestiones relacionadas con la legislación, el tipo de vehículos y las ventajas de contratar los servicios profesionales para el transporte de residuos urbanos.

¿Qué leyes expresan las cuestiones relativas al transporte de residuos?

A nivel legal el transporte de residuos está observado en los artículos 25 y 26 de la Ley 22/2011 de residuos y suelos contaminados. Esta Ley distingue entre el transporte de residuos no peligrosos y peligrosos (estos últimos tienen una legislación específica detallada), y sobre el transporte de residuos en función de si se destinan a la eliminación o a la valorización.

Teniendo esto en cuenta, la Ley 22/2011 es aplicable a todos los residuos a excepción de:

  • Emisiones a la atmósfera reguladas en la Ley 34/2007 de calidad del aire y protección de la atmósfera.
  • Suelos no contaminados excavados.
  • Materiales naturales excavados durante actividades de construcción.
  • Residuos radiactivos.
  • Explosivos desclasificados.
  • Materias fecales.
  • Aguas residuales.
  • Cadáveres de animales muertos.
  • Residuos resultantes de la prospección, extracción, tratamiento y/o almacenamiento de recursos minerales.

Por otra parte, el Real Decreto 180/2015, de 13 de marzo regula el traslado de residuos en el interior del territorio del Estado y específica, en su capítulo II, la información que debe contener el contrato de tratamiento y transporte de residuos. En éste se especificarán:

  • La cantidad estimada de residuos que van a trasladarse.
  • La tipología de los mismos mediante su codificación LER correspondiente.
  • La periodicidad estimada de los traslados y el tratamiento al que se someterán los residuos.
  • Cualquier otra información relevante para el tratamiento adecuado de los mismos.

¿Es necesario un permiso específico para el transporte de residuos por carretera?

Sí. La lectura analítica de la Ley deja patente que el transporte de residuos urbanos, tanto por carretera como por cualquier otro medio, debe ser realizado por una empresa especializada que debe solicitar esta acción de transporte, con una antelación de al menos 10 días, al órgano competente de cada comunidad autónoma de origen y de destino.

Esta notificación sirve para múltiples traslados siempre que:

  • Los residuos tengan características físicas y químicas similares.
  • Los residuos se trasladen al mismo destinatario y a la misma instalación.

De la misma forma, la entrega de residuos debe realizarse siempre a un gestor (empresa) autorizado.

¿Qué tipo de vehículos se utilizan para el transporte de residuos urbanos?

Para transportar residuos urbanos pueden utilizarse diferentes vehículos adaptados. La elección de uno u otro depende de la clase de residuo que se quiera transportar y de su naturaleza. De hecho, la gran variedad de desechos de carácter urbano hace que las empresas de gestión y transporte de residuos dispongan de una flota variada entre la que se encuentran:

  • Camiones portacontenedores (abiertos o estancos).
  • Camiones compactadores.
  • Camiones con gancho, cadena, grúa o pulpo específicos para cargas peligrosas.
  • Camiones tráiler.
  • Camiones con caja.
  • Camiones cisterna.
  • Prensas verticales.
  • Autocompactadores para residuos sólidos.

Para lograr un transporte de residuos eficiente y de calidad, las empresas deben contar con operarios especializados con el fin de ofrecer sus servicios acorde a las exigencias legislativas vigentes.

¿Qué ventajas aportan las empresas especializadas en el transporte de residuos?

Además de garantizar la óptima gestión y transporte de los residuos, existen otras ventajas que únicamente las empresas especializadas pueden ofrecer. Las más importantes son:

  • Garantizan una recogida y un transporte higiénico.
  • El transporte de residuos se realizará de manera respetuosa con el medioambiente. No hay que olvidar que uno de los objetivos de esta gestión es facilitar el proceso de reciclaje.
  • Las empresas profesionales transportan los residuos no tóxicos garantizando la salubridad. Si su traslado no se hace correctamente podríamos encontrar problemas de acumulación de desperdicios.
  • Las empresas como SMV garantizamos una recogida y un transporte de residuos seguro para personas, operarios, bienes privados y bienes públicos. Un tratamiento irresponsable puede causar graves daños personales y materiales, y suponer una importante multa de la administración pública (por ejemplo si hay un incendio, o si contaminamos un campo por una negligencia).

El transporte de residuos no peligrosos por carretera sigue siendo habitual y únicamente puede ser realizado por empresas especializadas como SMV. No se trata únicamente “llevar” los residuos de un lugar a otro, sino también de hacerlo de forma profesional evitando incidencias sanitarias y de seguridad, respetando la legislación vigente al respecto y promoviendo la economía circular.