La gestión eficiente de los residuos comienza en el propio domicilio de los ciudadanos, quienes deben separarlos, en función de su tipología, para depositarlos en los contenedores adecuados.

La separación correcta de residuos es fundamental, ya que permite a las instituciones y a las empresas gestoras como SMV:

  • Conocer, tanto cualitativa como cuantitativamente, la composición de los residuos reciclados para determinar su potencial aprovechamiento.
  • Evaluar el rendimiento de los centros de tratamiento.
  • Determinar en qué grado la separación que realizan los ciudadanos es correcta. De esta forma, es posible poner en marcha campañas de información y concienciación.

Los tipos de contenedores de colores son un método homogéneo e implantado prácticamente en todas nuestras ciudades que permite separar los residuos de manera sencilla, facilitando la recogida selectiva. Sin embargo, a veces existen dudas sobre dónde debemos depositar algunos tipos residuos. Por ejemplo, ¿dónde van la mayoría de nuestros residuos domésticos? ¿Cómo debemos usar el contenedor gris? ¿Por qué es importante diferenciarlo del contenedor marrón?

¿Para qué sirve el contenedor gris?

Durante mucho tiempo, en el contenedor gris (en algunas localidades es verde oscuro), se depositaban todos aquellos residuos que no podían tirarse a los otros contenedores (es decir, que no eran plásticos, vidrios o papeles). Sin embargo, con la llegada del contenedor marrón, el tipo de residuos que van en este contenedor ha quedado reducido a aquellos que no se reciclan y que tampoco pueden usarse para fabricar compost.

Contenedor gris: qué tirar en él para reciclar correctamente

En el contenedor de basura de color gris podemos tirar todos aquellos materiales y residuos que no son susceptibles de ser reciclados. Si te preguntas qué se tira al contenedor gris, algunos de los residuos que podemos (y debemos) depositar en este contenedor son:

  • Pañuelos usados.
  • Juguetes.
  • Biberones y chupetes.
  • Pañales.
  • Compresas y tampones.
  • Objetos cerámicos.
  • Polvo de la aspiradora.
  • Restos de polvo y pelos recogidos al limpiar o al barrer el suelo.
  • Desechos de animales domésticos y mascotas.
  • Algodón usado.
  • Colillas.
  • Utensilios de cocina (por ejemplo bayetas o estropajos usados).
  • Tiritas y vendas.
  • Bolígrafos, rotuladores, etc.
  • Cápsulas de café.
  • Chicles.
  • Toallitas desmaquillantes.
  • Bastoncillos.
  • Restos de podas y jardinería de gran tamaño.

Todos estos elementos es lo que se debe depositar en el contenedor gris para un correcto tratamiento.

¿Cuál es la diferencia entre el contenedor marrón y el contenedor gris? ¿Por qué es importante diferenciarlos?

La incorporación del contenedor marrón al sistema de gestión y recogida de residuos urbanos de muchas ciudades ha provocado que algunas personas se planteen cuál es la diferencia entre éste y el contendor gris.

Aunque todavía no está muy popularizado, el contenedor de basura marrón (también de color naranja) completa el círculo de reciclaje, y su principal objetivo es separar la materia orgánica de nuestra basura para usarla como abono o compost mediante un tratamiento posterior, disminuyendo de esta forma los fertilizantes nitrogenados usados en agricultura y que contaminan nuestros suelos y aguas subterráneas.

La importancia de utilizar correctamente el contenedor marrón es que, para que compost tenga la calidad suficiente y sirva como fertilizante, debe estar libre de impurezas, es decir, de sustancias que no sean materia orgánica. Por ejemplo, una colilla no puede degradarse en materia orgánica y tampoco tiene nutrientes para las plantas, por lo que acabaría contaminando el compost.  De ahí la importancia de separar correctamente los restos del contenedor gris y los del contenedor marrón.

Tal y como ya explicamos en nuestro blog, en el contenedor marrón podemos depositar restos de frutas, verduras, carnes, pescados y comida en general; cáscaras de huevo, de marisco y de frutos secos; posos infusiones y café; cerillas corcho (tapones) serrín o pequeños restos de plantas u hojarasca.

¿Dónde van los residuos del contenedor gris?

La mayoría de los residuos del contenedor gris son materiales biodegradables que acabarán degradándose por sí solos con el paso del tiempo. Sin embargo, es importante buscarles un destino acorde con sus características para evitar su descomposición y la contaminación cruzada del entorno.

Normalmente, los residuos depositados en el contenedor gris van a vertederos controlados o se utilizan para hacer rellenos sanitarios, es decir, que la basura se compacta y se va depositando en capas cubiertas por tierra – tratada e impermeabilizada – hasta que se satura, reduciendo el impacto en la zona y disminuyendo la contaminación del suelo. En ocasiones, estos residuos también se llevan a plantas incineradoras.

En cualquier caso, qué se debe depositar en el contenedor gris y que pasa con los residuos depende de los protocolos establecidos por cada Ayuntamiento sobre tratamiento de residuos, acorde con la legislación vigente internacional, nacional y regional (entre ellas la Directiva 2008/98/CE del Parlamento Europeo y la Ley 22/2011 sobre residuos y suelos contaminados (artículo 24)).

En SMV contamos con los servicios más adecuados para atender todas las necesidades de reciclaje de empresas e instituciones. Contamos con profesionales cualificados, y nos ceñimos a los marcos legales, económicos y sociales establecidos para la gestión de residuos urbanos.

Si tienes dudas en materia de recogida, transporte y tratamiento de residuos, o buscas una empresa profesional del sector, contacta con nosotros. Puedes encontrar alquiler contenedores de obra.